Comunicarse adecuadamente





Les comparto material de mi libro "Mi mujer me tiene arrecho", para mejorar la comunicación en pareja y otras áreas:

¿Qué es comunicarse adecuadamente?

Es informar a otras personas sobre nuestros pensamientos, deseos, estados de ánimo, expectativas, etc., con la mayor exactitud posible, de modo que dichos contenidos sólo indiquen lo que deseamos señalar. Para ello es preciso que las palabras, emociones, gestos y corporalidad emitidos, en conjunto, sean armoniosos o congruentes y no contradictorios.
Sin embargo; aunque así lo hiciéramos, es posible que la otra persona interprete nuestros datos sesgadamente, produciéndose “ruidos” en la interacción. Por eso, la comunicación es una corresponsabilidad, donde las partes involucradas tienen que ver con su inicio, desarrollo y desenlace.
En todo momento cada persona debe ser responsable de enviar los mensajes que pretende, sin contaminarlos; y quien los recibe también debe asegurarse de que está entendiendo dichos mensaje y no otros.
Ello puede lograrse con preguntas como: “¿me expliqué bien?”, “¿qué has entendido de lo que dije?”; “comprendí que quieres ésto, ¿lo he entendido bien?”, etc. Es muy frecuente que entre parejas se produzcan sobreentendidos, malentendidos, interpretaciones erróneas y estas situaciones son caldo de cultivo para problemas en las diversas áreas de la vida en común.
Según Liberman (pág. 124) existen varias formas de bloquear la comunicación: ordenar, moralizar (tú debes…) imponer soluciones (se debe hacer así porque…), reprender, criticar, pseudoaprobar (me parece bien, pero…), ridiculizar, interpretar, interrogar capciosamente (¿eso lo haces para molestarme?) y retirarse.

(Díaz Morfa, J. Prevención de los conflictos de pareja. 2003. Desclée de Brower, Bilbao)

A los anteriores podríamos sumar:

a) suponer (yo creí que…);
b) interpretar (eso se debe a…)
c) adivinar el pensamiento del otro (estás así por…),
d) iniciar la conversación en un punto y desviarse del mismo,
e) atacar la dignidad personal y no enfocarse en el comportamiento (eres una egoísta que no le importa llegar tarde y dejarme esperando)
f) etiquetar (eres…)
g) comparar (es que mi ex no era así),
h) descalificar (no sabes hacer eso)
i) generalizar (nunca, siempre, todo, nada, todos, nadie, los hombres (mujeres) son todos iguales),
j) enviar mensajes ambiguos (no sé, tal vez, quizá, a lo mejor, déjame ver, después te digo).
Las recomendaciones para mejorar las comunicaciones son: pedir, no exigir:
a) (me gustaría que…)
b) preguntar, no acusar (¿usaste ayer mi lapicero?; no, usaste ayer mi lapicero);
c) hablar de lo que se hace y no de lo que el otro es (“me molesta que dejes el piso del baño mojado, quisiera que no lo hagas más” y no “eres un descuidado que dejas el baño mojado”).

Especialmente en el contexto de las relaciones de parejas, es recomendable conocer y practicar una técnica conocida como “lenguaje yoico”, la cual consiste en que mediante el uso del pronombre “yo” la persona asume que sus pensamientos, emociones y conductas son su responsabilidad, lo cual no niega la posible influencia de la otra persona. Con esta técnica se evita el uso del pronombre “tú” que suele generar la percepción de estar siendo acusado y despertar fuertes emociones que incitan a atacar, defenderse o escapar; bloqueando los contenidos o mensajes.

Ejemplo: “tú eres un impuntual, que sólo piensas en ti y no me quieres”, aprender a decirlo así: “cuando llegas luego de la hora que hemos acordado y no me avisas, siento… pienso… y quiero proponerte que…”

 *********************************************************************************
Lunes a viernes, pm, por cita, La Campiña
Sábado: Chacao, todo el día
04129955174 - 02124169386
¡Te espero!

Comentarios

Entradas populares